In summary
En las comunidades de toda California, muchos residentes siguen recurriendo a las noticias que se transmiten de boca en boca para obtener mucha de la información sobre cómo cuidarse durante la pandemia. Las iniciativas locales para establecer fuentes de noticias fiables ayudan a cerrar la brecha digital.
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Recientemente, en un sábado caluroso, los residentes de una pequeña sección de casas al oeste de Fresno se agruparon bajo la sombra para esperar la distribución de productos de higiene y comida.
Muchos de los que esperaban en las filas para recibir papel higiénico, comida enlatada y mascarillas se enteraron de la distribución a través de la creciente audiencia en los medios sociales de la organizadora Lilia Becerril.
Aunque estos productos son esenciales en la lucha contra COVID-19, ponerlos en manos de las personas que los necesitan es un desafío, especialmente en las zonas rurales que carecen tanto de una estructura de gobierno municipal como de una fuente dedicada a las noticias locales, según Becerril, residente de Fresno.
Desde que la pandemia del coronavirus se extendió al valle central de San Joaquín a principios de marzo, Becerril intensificó sus esfuerzos en tres páginas de Facebook que dirige para obtener información sobre la distribución de alimentos, los centros de pruebas de coronavirus y cómo los residentes pueden obtener ayuda en caso de desempleo. Iniciativas similares se están llevando a cabo en toda California, donde la brecha digital es mayor en las comunidades de inmigrantes y de bajos ingresos con acceso limitado al internet. Incluso cuando las personas están conectadas, a menudo no se sabe dónde encontrar fuentes confiables de noticias.
“La información a veces se pierde”, dijo Becerril. “En este momento, sobre todo, estamos en una crisis, y no tenemos otra opción que conectarnos”.
Ella estima que ha ayudado a unas 500 familias en los últimos dos meses, muchas de las cuales son trabajadores del campo o recientemente desempleados y fueron eliminados de los paquetes de ayuda financiera del gobierno. Expresó que esos residentes, que a menudo viven en zonas con escasa conexión al Internet, durante muchos años han luchado por obtener información local fiable.
La pandemia de coronavirus aumentó las necesidades, señaló.
“Si esta crisis me está afectando a mí, ¿cómo está afectando a otras personas?”, subrayó Becerril. “Tengo la fortuna de que la información que comparto me ayudó a ganarme la confianza de la gente”.
Trabajó con una variedad de organizaciones locales para ponerse en contacto con las familias más necesitadas. Esos métodos han ayudado a las familias a mantenerse al día con las facturas de los servicios públicos y los comestibles, y les han proporcionado equipos de protección como mascarillas.
Un estudio reciente del Laboratorio de Políticas de California de la universidad UCLA señaló que las personas de color, las personas mayores, las mujeres y los niños son los más afectados por la pandemia de coronavirus. Esas son también muchas de las mismas personas que Becerril y otros en el Valle organizan para ayudar en los últimos años.
Becerril, que habla un inglés limitado, dijo que su participación en la comunidad comenzó después de ver a niños en edad escolar cerca de su casa hace unos años hacer aviones de papel con volantes de la escuela. Sus vecinos eran padres que sólo hablaban español, y ella pensaba que la información de la escuela no les llegaba. Hoy en día, sus boletines de medios sociales llegan a miles de personas.
La respuesta de las agencias de salud
En uno de los condados más afectados por COVID-19, los funcionarios de la Agencia de Salud y Servicios Humanos del condado de Tulare dicen que iniciaron temprano a comunicarse con las comunidades con necesidades de acceso al idioma y a las que no suelen buscar mensajes de salud pública.
Tammie Weyker-Adkins, la portavoz del departamento dijo que la agencia aumentó su uso de divulgación digital y volantes para llegar a los residentes en diferentes idiomas. Como muchos en el estado, la agencia informa regularmente a sus seguidores en línea respecto a la situación del coronavirus en el condado desde que comenzó.
“Creo que realmente hemos utilizado eso a nuestro favor para tratar de hacer llegar la información a la gente”, dijo Weyker-Adkins. “Comunicar eficazmente la información a la audiencia adecuada en el momento adecuado con la información adecuada, eso es vital”.
A principios de mayo, el departamento de salud del condado de Tulare comenzó a emitir mensajes de radio dirigidos a los residentes latinos y asiáticos. La iniciativa se financia gracias a una subvención de la organización gubernamental “Listos California”, una campaña estatal de preparación para casos de desastre. El condado también se propuso distribuir tarjetas postales a los adultos mayores y mascarillas para las personas sin hogar con información impresa sobre el virus y sobre cómo mantenerse seguros, explicó Weyker-Adkins.
Aunque cree que el condado tuvo tiempo para prepararse, Weyker-Adkins dijo que las consecuencias de la crisis de salud pública han dejado a muchos con dudas. Señaló que el condado ha tratado de determinar la mejor manera de llegar a los residentes que no siguen las órdenes del estado para limitar la propagación del virus.
“No se tiene esa experiencia a menos que uno se vea involucrado en un desastre o reciba algún tipo de entrenamiento”, indicó Weyker-Adkins. “Incluso con la preparación, cuando estás en medio de la crisis, es definitivamente otra cosa”.

Cómo llegar a los residentes en áreas rurales
En muchas de las pequeñas ciudades del Valle, muchos residentes trabajan al aire libre y dependen de la información de boca en boca para muchas de las noticias, explicó Juan Carlos Mosqueda, residente de Orosi y estudiante del Colegio Comunitario de Sequoias en Visalia.
“Hablan de ello en el trabajo”, indicó.
Mosqueda explicó que obtener información rápida y confiable es visto como un lujo para los residentes donde vive. Sus padres, que son trabajadores agrícolas, a menudo sintonizan la radio en español en el viaje al trabajo en la plantación de frutas, y ven segmentos de noticias en la televisión por la tarde. Pero la información no siempre aplica a ellos directamente.
“En una comunidad donde las personas hacen un trabajo muy duro, no tienen la energía para informarse como en otros lugares”, indicó Mosqueda.
Para los activistas comunitarios, combatir los efectos económicos y sociales del virus incluye asegurarse de que los residentes no reciban información errónea.
Leslie Martínez, promotora de políticas públicas del Leadership Counsel for Justice and Accountability, dijo que la información que se comparte verbalmente puede ser engañosa si los residentes no reciben la información correcta en primer lugar. Agregó que los residentes de Lanare, una pequeña comunidad no incorporada en el suroeste del condado de Fresno, están confundidos desde hace semanas en temas como el alquiler y el corte de servicios públicos.
Al mismo tiempo, Martínez dijo al diario The Bee que “hubo silencio” en sus intentos de comunicarse con los supervisores del condado o con las oficinas gubernamentales para obtener información.
‘Desiertos de noticias’ durante COVID
Carolyn Powers, supervisora de programas para el Colectivo Listening Post en InterNews, explicó que los funcionarios del gobierno como los supervisores juegan “un papel importante” en informar a los residentes durante una crisis.
Eso es especialmente relevante ya que muchas comunidades no tienen un servicio de noticias locales o viven en áreas donde es difícil tener acceso a la información. Estas comunidades, conocidas como “desiertos de noticias”, se han vuelto cada vez más preocupantes durante la pandemia ya que tienden afectar más a las zonas rurales, explicó Power.
Sin embargo, recientemente se ha hecho todo lo posible, tras un estudio del 2019 del ecosistema de noticias del Valle, para aumentar el acceso a la información en las comunidades que la necesitan. El Colectivo Listening Post publicó un estudio a finales del año pasado en el que el grupo examinó los hábitos de consumo de noticas de los residentes afroamericanos, latinos y asiáticos en las zonas rurales.
El estudio encontró que los residentes se preocupaban más por obtener información sobre salud, vivienda y las escuelas; temas que se han vuelto cada vez más importantes durante la pandemia. Tras el estudio, el colectivo concedió subvenciones a diferentes proyectos de noticias en el Valle destinados a las comunidades desfavorecidas.

Proyectos de información
Uno de los proyectos de noticias aprobados después del estudio incluye The Ivanhoe Sol, un periódico sin fines de lucro administrado con la ayuda de voluntarios.
El periódico impreso se envía por correo a todos los hogares de Ivanhoe, una comunidad de unos 4,500 residentes en el condado de Tulare. Ofrece información sobre cierres de negocios, ofertas de trabajo y recursos de ayuda disponibles.
Los despidos en los distritos escolares y en otros negocios han afectado recientemente a los residentes de Ivanhoe, dijo el editor en jefe Pedro Hernández. En uno de sus primeros números, el periódico incluyó pasos sobre cómo solicitar los beneficios de desempleo. La información suele estar escrita en español e inglés.
Hernández dijo que hacer llegar el periódico a cada hogar ha sido una manera efectiva de mantener informados a los residentes mayores que de otra forma tendrían que depender de sus teléfonos o de la televisión para obtener información local. Eso es un desafío con el alto precio y la falta de fiabilidad de internet, explicó él y los voluntarios del periódico.
“Hay un cambio hacia la interface digital, pero en un lugar como el Valle, no es una garantía”, señaló Hernández. “El correo es realmente una de las únicas formas de comunicación fiable entre usted y una entidad. Veo el servicio postal como el respaldo de todas las demás formas de comunicación. Funcionaba antes de que se creara internet”.
Pero también hay otras iniciativas que se hacen desde el internet.
Sergio Cortés, cofundador de la plataforma de medios digitales con sede en Fresno, USpark Valley, dijo que llegar a los jóvenes para informarles sobre los efectos de la pandemia también ha sido importante, ya que los grupos más jóvenes no tienden a seguir las noticias de cerca. USpark Valley también recibió una subvención del Post Collective.
Cortés explicó que la plataforma no compite con otras fuentes de noticias, en su lugar él y su pequeño equipo agregan y citan información ya publicada por otros sobre el coronavirus y otros temas, y luego la distribuyen en plataformas digitales, como Instagram y Twitter.
“Esto está afectando a nuestras comunidades de manera muy profunda”, dijo Cortés. “Sólo porque esté en las noticias todo el tiempo, no significa que llegue a todo el público”.
Cresencio Rodriguez-Delgado es un reportero del diario Fresno Bee. Este artículo forma parte del proyecto California Divide, una colaboración entre las salas de redacción que examina la desigualdad de ingreso y la supervivencia económica en California.
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