En resumen
La Universidad de California y el sindicato de profesores de la UC llegaron a un acuerdo después de años de negociaciones, dando lugar a una huelga planificada. Además de los aumentos, los profesores aseguraron promesas de estabilidad laboral. Una investigación de CalMatters muestra cuán frágil es su empleo.
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Los 6,500 profesores de la Universidad de California cancelaron su huelga planificada hoy después de ganar concesiones largamente buscadas por parte de la gerencia de la UC, incluidos aumentos salariales de aproximadamente un 30% durante cinco años para sus miembros y promesas de estabilidad laboral.
El acuerdo, negociado alrededor de las 4 am, siguió dos días de sesiones maratónicas de negociación y culminó un estancamiento laboral que comenzó hace casi tres años.
“Lo que cambió es que realmente íbamos a ir a la huelga”, dijo Mia McIver, presidenta del sindicato de profesores, el Consejo Universitario-Federación Estadounidense de Profesores. “Ellos entendieron lo enojados que estaban nuestros miembros”.
El paro laboral habría cancelado hasta un tercio de la instrucción de pregrado en el principal sistema universitario público del país.
Los dirigentes sindicales convocaron la huelga durante el fin de semana para presionar a los negociadores de la UC. Numerosos legisladores estatales han estado instando a la UC a resolver la disputa laboral, culpando a la universidad por el estancamiento. Ayudar al sindicato fue un compromiso de más de 800 profesores de alto nivel para cancelar las clases en solidaridad con los profesores en huelga.
La UC dijo el lunes que la huelga era innecesaria y perjudicial para los estudiantes. “Creemos que le hemos dado al sindicato una excelente propuesta, y que usted y sus colegas merecen la oportunidad de votarla”, escribió Leticia Silas, directora ejecutiva de relaciones laborales de la UC en una carta publicada el lunes por la noche. “Ya es hora de llegar a un acuerdo”.
El sindicato y la gerencia de la UC firmaron esta mañana un documento en el que se describen los detalles del nuevo contrato. Los términos completos se detallarán más tarde hoy. Los miembros del sindicato luego votarán si aprueban el contrato en algún momento de las próximas dos semanas.
Los instructores de la UC normalmente tienen títulos de doctorado, pero carecen de estabilidad laboral y el salario que reciben no es muy bueno. Una investigación de CalMatters encontró que una cuarta parte de los profesores dejan su trabajo anualmente. Sus contratos a corto plazo pueden durar solo unos meses antes de que deban volver a presentar una solicitud, su salario promedia alrededor de $ 32,000 debido a las oportunidades laborales limitadas y no existe un sistema de revisiones de desempeño para determinar cuándo y cómo se puede volver a contratar a un profesor.
El acuerdo aborda muchas de esas preocupaciones e incluye:
- Aumentos salariales anuales del 7%, 3%, 3%, 3% y 4% para todos los profesores, más un aumento mayor para los profesores con salarios más bajos y otros aumentos basados en el desempeño;
- Contratos de trabajo de uno, dos y luego tres años;
- Revisiones exhaustivas de desempeño al final de los contratos de dos y tres años y una revisión escrita más breve después de un nombramiento de un año;
- Derechos de recontratación si hay trabajo disponible para los profesores que aprobaron sus revisiones;
- Más compensación para los profesores que imparten clases con más de 200 estudiantes o que tienen componentes de escritura pesados.
Otros detalles fueron incluidos, como el que dice que los departamentos académicos pueden asignar a los profesores trabajo adicional a tiempo parcial si está disponible.
“Pero la gran lucha fue crear trayectorias profesionales viables y centradas en la enseñanza para las personas que las desean y realmente creo que lo hemos logrado”, dijo McIver.
La directora ejecutiva de relaciones laborales de la UC, Leticia Silas, dijo en un comunicado: “La Universidad está orgullosa de la dedicación y el compromiso con las relaciones laborales armoniosas que ambas partes demostraron para lograr un trato justo que honre a nuestros profesores y priorice la misión educativa de la Universidad”.
La amenaza de huelga se debió principalmente a las acusaciones de prácticas laborales injustas de la UC. Esa distinción es importante: por ley, el sindicato no podía hacer huelga por el contrato porque estaban en una mediación dirigida por el estado con la UC. Para aumentar la confusión, la UC y los conferencistas también han estado negociando a puerta cerrada a través de un mediador estatal.
El sindicato de profesores y la UC resolvieron una queja clave sobre prácticas laborales injustas. Los profesores ahora obtendrán cuatro semanas de licencia familiar remunerada al 100% del sueldo; anteriormente, la UC ofrecía licencia remunerada al 70% y solo para los profesores que trabajaban más de 1,250 horas en un año, lo que excluía a la mayoría de la fuerza laboral porque muchos trabajan a tiempo parcial. El sindicato pedía ocho semanas de licencia pagada.
Los profesores no ganaron todo lo que querían. La UC aún no pagará el Seguro Social de un profesor si el profesor trabaja menos del 50% de lo que se considera tiempo completo. Los profesores en esa situación tampoco reciben contribuciones de jubilación de la UC. Los conferencistas no recibieron la promesa de un comité de arbitraje neutral para resolver las disputas sobre la carga de trabajo ni cambios en los procedimientos de quejas.
“Creo que este es un momento completamente extraordinario en el tiempo”, comentó McIver. “Siento que hemos logrado algo real”.
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